Bueno no solo del helado sino también de ese extraño artilugio que a los niños se les coloca en la boca cuando van al médido por dolor de garganta y que, triunfantes, vuelven a casa con ellos. Dándoles una vuelta de tuerca se pueden convertir en: PULSERAS
y también en:
MUÑECAS
Todo ello se ha forrado con telas y papeles reciclados
Hemos cambiado armarios y han aparecido vestidos que en varios años no hemos llevado. Que pasada, existe un binomio perfecto: los TETRABRIK y las TELAS. Estupendos monederos.